
¿Por qué tardamos tanto en ir al fisioterapeuta?
En "ConsultaClick fisioterapia y osteopatía", Gloria Jiménez nos cuenta ¿Por qué tardamos tanto en ir al fisioterapeuta?
No son pocas las ocasiones en que me hago esta pregunta, especialmente cuando acude un paciente a la consulta quejándose por un dolor de cuello que atribuye a un mal dormir, o cree provocado por un mal gesto. A continuación me relata como se administró un analgésico y/o un relajante muscular recomendado por un amigo o familiar, y cómo al aliviarse dejó de darle mayor importancia. Ahora, veamos que ha pasado mientras tanto.
Por las mañanas, cuando se incorpora a su puesto de trabajo y utiliza el ordenador, comienza a notar hormigueos en los dedos de la mano. Al no remitir, decide ir al médico al que, al no concederle importancia ni relación con su ya mitigado dolor de cuello, obvia decirle que se ha administrado antiinflamatorios. El médico, por norma general y ante un síntoma de este tipo, le receta más antiinflamatorios ( en la experiencia que me suelen contar mis pacientes ) Resultado: dos semanas de antiinflamatorios y relajantes musculares acumuladas y la sensación no remite. Como último recurso le recomiendan que venga a verme.
De haber acudido en la primera ocasión, el resultado hubiese sido, a lo sumo, dos sesiones de fisioterapia “y listo”; por el contrario, ahora el cuadro es más agudo y las sesiones necesarias se duplican, siendo más costosa la recuperación de esa “pequeña contractura” en su origen.
Esperamos tanto porque nos confiamos y auto-medicamos (doble error); enmascaramos el dolor, pero no eliminamos el problema, que va incrementándose sin darnos cuenta.
La figura del fisioterapeuta no sólo esta para rehabilitar lesiones causadas por un traumatismo, sino para poder prevenir posibles desequilibrios musculares creados por una mala higiene postural, que nosotros intentamos corregir , cada vez nos cuidamos más, pero , en ocasiones, sin pedir ayuda a un especialista que nos aconseje.
No esperemos a que ese “¡al fin y al cabo, no duele tanto!” se convierta en “es que no puedo ni levantar el brazo sin dolor”, “hay que ver lo que me cuesta abrir un simple bote de cristal" y otras expresiones por el estilo.
Los fisioterapeutas estamos para ayudar desde la más mínima dolencia hasta una recuperación funcional; un trabajo multidisciplinar siempre será más completo y tendrá mejores resultados que el socorrido y equivocado auto-medicarse, con las consiguientes consecuencias al no dar la importancia que se merece al dolor y esperar a que empeore para acudir al profesional de la salud correcto.
Lucas Championniere dijo en 1850: “El Movimiento, es la Vida”.
No dejemos que las fijaciones nos provoquen dolores que no nos dejen movernos y así podremos disfrutar de la Vida.
El Fisioterapeuta es un profesional sanitario con formación universitaria. Sus competencias quedan recogidas en la Ley de Ordenación de Profesiones Sanitarias. La titulación ostentada es la de Diplomado en Fisioterapia (3 años). Según la nueva normativa, de adecuación al espacio europeo, será el Título de Grado en Fisioterapia (4 años).
35.630 licenciados en fisioterapia existían en España en el año 2010, según datos del INE.
RECOMENDADO
DISFUNCIONES DE ESTóMAGO Y EL DOLOR DE ESPALDA
18 ago 2014
LAS 10 ENFERMEDADES MáS FRECUENTES EN NIñOS
04 dic 2012
DEJA TU COMENTARIO
Tu email no sera publicado. Los campos con * son requeridos